El dilema del auto

Salir o no con el auto es todo un dilema. No soy alcoholico, es más, hasta los 18 años no tomaba cuando salía. Pero hace un tiempo decidí que para pasarla bien en una sociedad en la cual el 80% de los que salen se alcoholizan, es necesario activar el sistema límbico.

Como ya he contado vivo en Villa Devoto, a aproximadamente 70 cuadras de la media de mis amigos (la mayoría habitan en Palermo) y a 90 cuadras de los boliches que frecuento. De día me manejo en auto, y cuando no es así no dudo en tomarme la linea San Martín o en su defecto el 107 hasta belgrano. El problema es que de noche la "Sanma" pasa a lo sumo cada 30 minutos.

No me gusta manejar alcoholizado (Admito haberlo hecho, aunque en contadas ocasiones), pero tampoco me gusta el $24.50 que me dice el tachero cuando me deja en mi casa a las 7 de la mañana. Desde el punto de vista económico la probabilidad que choque o que me agarre el control de alcoholemia manejando alcolizado es de 1 en 20 (estadística albritaria pero de las últimas 20 veces que salí con el auto solo una me agarró, anecdota que ya conte) y suponiendo que el costo promedio es de $1.000. Esto significa que el riesgo es de 1 sobre 20 por 1.000 lo qu es igual a $50. Si mis datos son ciertos es preferible tomarse un taxi. $24.50 x 2 es igual a $49. Además hay que descontarle la nafta, el estacionamiento, y el dolor de huevo que es si te llegan a sacar el auto 6 meses (cuyo costo económico es en principio neutro, por que dejaría de usar el auto, con lo que ahorro en nafta amortizo parte de la multa).

No obstante, la mayoría de las veces eligo otra opción. Voy a donde tenga que ir en auto (ahorro 25), lo dejo estacionado en la vereda. Hago mi noche normal. Si no estoy apto para manejar me voy a dormir a lo de un amigo, y al otro día me levanto a las 10 pm y vuelvo manejando a casa.