Tras haber finalizado el discurso del diputado Pinedo en el que pronunció la famosa frase "no puedo explicar algunas ausencias de mi bloque", la diputada Cintya Hotton (que se hizo popularmente conocida por su sincera defensa a la "familia normal") pidió una cuestión de privilegio en la que denunció públicamente que había sido "tentada" a ausentarse de su banca a cambio de "favores políticos", pero señaló que no iba a dar el nombre de la persona (que también ocupa un cargo legislativo nacional) que fuera su interlocutora ya que le tenía aprecio y consideraba que esto era un problema del "sistema corrupto" y no de personas.
En ese momento, nos pareció totalmente desacertada la denuncia dado que en un ámbito de semejante envergadura no es válido el latiguillo popular "se dice el pecado y no el pecador", cuando se hace una denuncia a un funcionario público debe hacer con nombre, apellido y pruebas.
En el mediodía de hoy, la diputada Hotton se prensentó en la comisión de ausuntos constitucionales (que preside Graciela Camaño) y reiteró la denuncia, agregando que había hecho una presentación ante la justicia donde daba el nombre, y creía necesario debatir en comisión si era correcto o no publicar el nombre de la acusada y la denuncia en sí mismo. Al finalizar de hablar entregó una copia de su descargo en un sobre cerrado a Camaño.
Camaño, tras una mínima consulta a sus pares, decidió abrir la carta que Hotton había dirigido a la justicia, delante de todos los medios. En ella simplemente decía que tras haber llamado a la diputada Fadel para pedirle que la apoye en un proyecto propio, esta le habría preguntado como iba a votar el presupuesto. Hotton contestó que iba a votar en contra, y Fadel le habría propuesto que votara a favor y dicho que "había mucho en juego" más allá de nombramientos. La "denuncia" no dice mucho más que esto. Por lo tanto, parece totalmente absursada.
No decimos que la compra de votos y las coimas no existen pero este caso es totalmente absurdo e ínfimo. Si bien la diputada propuso que se cree una comisión de transparencia para regular los derechos que tienen los legisladores, esta denuncia en sí misma ensucia de más a Fadel, que no es más que un peoncito en este gran ajedrez político. Ojalá que todos los hechos de corrupción fuesen de esta magnitud mínima.
Seguramente, este proceso quede en la nada misma es que ñas denuncia, si las hay, y más viniendo por parte de un miembro de la cámara, deberían ser mucho más contundentes. Para especulaciones tenemos al periodismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario