miércoles, 10 de noviembre de 2010

Me encantan las pechugonas

Pero lamentablemente en economía uno no solo se maneja preferencias sino también por precio. Recuerdo que cuando niño solía comer casí todos los días pechuga. Milanesas, churracos, cortaditas con papa y mayonesa, rellenas, a la parrilla. Seguramente el pollo fue un insumo fundamental del desarrollo de este cuerpo privilegiado. Mi amor por las pechugas es irrefutable, pero de ahí a pagar $41.99 el kilo de pechugas es demasiado.

En argentina más del 50% de los jefes de hogar cobran menos de $ 2.400. Mis abuelos ambos jubilados cobrán entre los la misma cantidad. En otras palabras cobran solo 60 kilos de pechuga al mes. Es decir que por día solo ganan 4 miseras pechuguitas cada uno. Sin contar, la realidad que es que gastan el más del 50% de sus ingresos en medicamentos, tratamientos médicos, etc.

Una gran amiga que trabaja en un call center 6 horas gana $1.800, además de eso estudia en una universidad privada (que le pagan sus padres) y vive en un departamento (que también le pagan sus padres). Entre expensas, internet, luz y gas se le van 600. Es decir, le quedan solo 30 kilos de pechugas por mes. Un kilo por día. Sueña con recibirse algún día y encontrar un trabajo un poquito mejor. Ni se le ocurre pensar que algún día llegará a tener su vivienda propia, su auto, o viajar por el mundo como siempre soñó.

¿Donde está el estado de bienestar? ¿Donde están los sueños en este "modelo"?
Que un kirchnerista me explique por favor donde está el "progreso"!!!!
¿Cómo hacen mis abuelos o mi amiga para progresar?

Lamento mucho las afirmaciones del Ministro Boudou que siempre defendimos. Pero le faltó el respetó a todos los argentinos diciendo "la inflación solo afecta a la clase media y a los ricos". Impresentable.

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